El sindicato lamenta el regreso al modelo Eresa y muestra su preocupación respecto al uso de la IA para diagnósticos
La Federación de Serveis Públics de UGT del País Valencià ha denunciado la privatización encubierta y generalizada de servicios de radiología en la mayoría de departamentos de salud de la Comunitat Valenciana a través de diferentes fórmulas. Se trata de externalizaciones que, en opinión del sindicato, suponen dinamitar la reversión al sistema público realizada la pasada legislatura y que puso fin al conocido como modelo Eresa.
La información recabada por el sindicato a raíz de la notable escasez de personal facultativo especialista en radiología en el Departamento de Marina Baixa pone en evidencia la existencia de una grave crisis en los servicios de radiología que afecta a toda la Comunidad Valenciana. UGT ya denunció el pasado mes de julio que el hospital de la Marina Baixa se había quedado sin radiólogo de guardia algunas noches y que los días festivos y la guardia médica de radiología se hacía desde una empresa privada por teleradiología. Es decir, el radiólogo o la radióloga está en su casa y resuelve la situación desde allí.
Pero Marina Baixa es solo un ejemplo del descontrol en los servicios de radiología en muchos departamentos y de los procesos de privatización/externalización del servicio que está ejecutando la Conselleria de forma discreta. Así, según un estudio realizado por el sindicato al menos en los departamentos de Sagunto, Requena, Alcoi y Clínico las pruebas de Resonancias Magnéticas (RM) que se están realizando en el hospital se derivan a Ascires/Inscanner (antigua Eresa) donde son informadas. En Castelló, por su parte, el informe de la mamografía lo hace también esta empresa, mientras que en Gandia las ecografías y los TCs no urgentes también son derivados a esa firma que se encarga de informarlos. En el departamento de Xàtiva-Ontinyent la Conselleria de Sanidad ha llegado a un acuerdo con un hospital privado -San Jordi de Alcoi (IMED)- para derivar a los pacientes y realizar las pruebas allí.
Por su parte, en Orihuela y Torrevieja, la Conselleria de Sanidad ha contratado los servicios de Atrys (una empresa privada de teleradiología con radiólogos y radiólogas en Barcelona) para que en algunas franjas horarias puedan realizar las guardias médicas a distancia.
Para completar este despropósito la Conselleria de Sanidad tiene en la mayoría de hospitales equipos infrautilizados con el agravante que fueron pagados con fondos europeos o donados por Amancio Ortega, mientras se deriva actividad a empresas privadas como plan de choque. UGT Serveis Públics ha solicitado en reiteradas ocasiones información al respecto sin obtener respuesta hasta al momento. UGT considera que la situación de los servicios de radiología es muy preocupante y no sólo porque supone volver a dejar en manos privadas un servicio sanitario esencial. En la Marina Baixa la ausencia de especialistas ha llevado a la suspensión de tomografías computarizadas (TC) en horarios críticos. En los casos donde ha sido imprescindible realizar estas pruebas, los radiólogos y radiológas del hospital de San Juan han tenido que asumir la responsabilidad, con una incremento de la ya sobrecarga diaria de trabajo o bien el paciente ha acabado derivado a otro centro. Esta situación ha provocado demoras significativas en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes.
Uso de la Inteligencia Artificial en diagnósticos
Por otro lado, y respecto a la reciente noticia en la que la Conselleria de Sanidad utilizará a partir de septiembre la IA en el cribado de cáncer de mama y otras pruebas, UGT muestra su preocupación sobre el hecho de que se extienda el uso de la IA para el diagnóstico en sustitución de los radiólogos. El sindicato considera que la IA puede ser una herramienta útil y un apoyo al diagnóstico, pero nunca un sustituto del facultativo. Este método no autorizado para el diagnóstico definitivo, puede registrar errores de diagnóstico que deberán ser corregidos posteriormente por profesionales humanos. Esto implica malos diagnósticos de inicio y retrasos en los diagnósticos definitivos, por lo que hay que ser extremadamente cuidadoso y transparente en su implantación. La falta de radiólogos y radiólogas y la externalización del servicio ya está teniendo sus primeras consecuencias graves. En algunos casos, la realización de pruebas urgentes se ha demorado durante horas, con lo que esto supone en la evolución de la patología del paciente. Además, los radiólogos externos no disponen de toda la información clínica del paciente porque no pueden acceder a la historia clínica del paciente.
A UGT también le genera dudas este modelo respecto a la custodia de los datos del paciente, ya que las pruebas se están informando desde otros centros no públicos e incluso desde otras comunidades. Para el sindicato es imperativo que se tomen medidas urgentes para solucionar esta crisis y no perder de los hospitales públicos un servicio central como es la radiología . El bienestar de los pacientes y la calidad del servicio sanitario dependen de una dotación adecuada de personal especializado. La comunidad médica y los responsables de la gestión hospitalaria deben trabajar de manera conjunta para garantizar que nunca más se comprometa la atención sanitaria debido a la falta de personal. UGT considera que lo que ocurre con los servicios de radiología es una prueba más de que el Decreto Ley 2/2024 dirigido a garantizar la asistencia sanitaria integral de los pacientes no es una solución y que los problemas no sólo persisten, sino que, se han agravado en la mayoría de los departamentos.
