Los sindicatos denuncian que Conselleria de Sanidad se niega a llevar a cabo las mejoras acordadas para más de 2.500 personas trabajadoras tras la reversión de sus centros de trabajo.
La Federación de Serveis Públics de UGT-PV y Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios, FSS CCOO PV anuncian movilizaciones ya que la Conselleria de Sanidad se niega a cumplir los acuerdos a los que se llegó con los sindicatos con motivo de las huelgas convocadas en el primer semestre de 2023, por el personal laboral a extinguir, para homogeneizar sus condiciones laborales con el personal estatutario.
En la actualidad, la Conselleria de Sanidad gestiona a aproximadamente 2500 trabajadores distribuidos entre Torrevieja, Alzira, resonancias y farmacias sociosanitarias de Castellón, Valencia y Alicante. Estas personas trabajadoras, provenientes de procesos de integración que buscaban devolver al sistema público lo privatizado, enfrentan condiciones laborales desiguales y precarias con respecto al personal estatutario, lo que dificulta la gestión eficiente por parte de las gerencias.
El compromiso de estos sindicatos, desde la primera integración en 2018, ha sido equiparar las condiciones de trabajo del personal laboral a extinguir con el personal estatutario. Iniciadas las negociaciones para pactar una mejora de las condiciones laborales del personal laboral a extinguir y viendo que estas erán infructuosas, pues han pasado seis años desde que se inició la primera negociación, este personal ha tenido que promover movilizaciones y ha sido a través de acuerdos de salida de huelga donde se consiguió acordar un calendario de mejoras laborales.
Estos acuerdos que están registrados ante la autoridad laboral y en el caso de las resonancias y farmacias está publicado en el DOGV desde el pasado 3 de agosto. La Conselleria se niega a reconocer la validez de los mismos y argumenta que sin el informe preceptivo de Hacienda estos acuerdos están viciados de nulidad; una excusa pobre para no cumplir este tipo de acuerdos ya que tienen rango de convenio colectivo.
Para UGT y CC OO esta situación es insostenible y va empeorando con el paso del tiempo, puesto que el personal laboral a extinguir, desempeñando las mismas funciones que el personal empleado público, sufre año tras año unas condiciones indignas. Estos sindicatos no están dispuestos a renunciar a los acuerdos alcanzados tras intensas negociaciones y movilizaciones, por lo que anuncian movilizaciones a principios de febrero.