El sindicato denuncia que la Conselleria sigue adelante con la norma sin incorporar ninguna propuesta de calado de los sindicatos ni de la comunidad sanitaria y considera inaceptable que la prioridad no sea la emergencia sanitaria por las inundaciones
UGT Serveis Públics del País Valencià denuncia la falta de negociación real del decreto de Atención Primaria por parte de la Conselleria de Sanidad, que no ha aceptado ninguna de las propuestas de fondo aportadas por sindicatos, colegios profesionales o asociaciones en las últimas semanas. Así, el último borrador presentado hoy en mesa técnica es, salvo cambios superficiales, el mismo que se presentó en su día y que contaba con el rechazo generalizado de la mayoría sindical. Para UGT, Sanidad ha realizado una simulación de negociación cuya finalidad es justificar la aprobación de una norma que, además, es en estos momentos totalmente inapropiada.
Durante la mesa técnica (antesala de su aprobación en mesa sectorial ya que se ha trasladado que ya no habrá cambios sustanciales), UGT Serveis Públics ha instado a la Conselleria de Sanidad a centrar su prioridad en solucionar los graves problemas que afectan a los centros sanitarios afectados por la DANA, así como atender a la ciudadanía por esta emergencia sanitaria. El sindicato considera que no es el momento de abordar un decreto que supone un cambio de paradigma y que, además, lejos de solucionar los problemas, crea un modelo jerarquizado e ineficaz.
La propuesta de la Conselleria crea desconfianza, desmotivación y disminuye la eficacia, del sistema sanitario por una deficiente planificación y recortes económicos, al tiempo que supone una desconexión de las necesidades reales de la población.
Como ya denunció este sindicato, la norma implica una excesiva jerarquización del modelo y conlleva una disminución de la calidad asistencial porque las decisiones se concentran en los niveles superiores, lo que dificulta la flexibilidad, la innovación y la capacidad de respuesta del equipo. Además, supone una sobrecarga laboral para todas las categorías, puesto que las diferentes jefaturas de servicio, saldrán del presupuesto. No habrá aumento de plantilla en los equipos de trabajo, sino de una retribución excesivamente elevada y la creación nuevas plazas de jefaturas de servicio, que no suponen un alivio en las cargas asistenciales, lo que afecta sin duda a la calidad en la atención a la ciudadanía.
Por otro lado, la Conselleria sigue sin presentar la memoria económica de este proyecto y su viabilidad, tal como exigió UGT desde el inicio de las conversaciones. UGT insta al Consell a tener en cuenta que las decisiones y políticas impuestas sin consenso de la comunidad sanitaria, generan descontento y darán pie a nuevas protestas, como las que están sucediendo desde hace unos meses.
En definitiva, la Conselleria de Sanidad propone un modelo anclado en el siglo XIX, desacreditado, obsoleto y contrario a las líneas vanguardista de la asistencia sanitaria europea y que nuestra Comunidad Valenciana abanderó hasta ahora.
UGT considera que la propuesta abre un escenario preocupante no solo para el personal sanitario, sino para la ciudadanía ya que supondrá desmantelar la integración de los equipos multidisciplinares y el autocontrol que los equipos de atención primaria tenían sobre sus actuaciones y sus expectativas como profesionales.
Entre otras cuestiones, el sindicato denuncia que la norma no determina el número de pacientes por centro sanitario para elaborar ratios y los recursos humanos necesarios, por lo que se mantendrá la demora en las citas y las listas de espera y se aumentará las cargas al excluir de atribuciones asistenciales a los jefes de servicio y de sección. Por otro lado, las agendas profesionales serán controladas bajo jerarquía, no por consenso, y no se facilita vehículos para la actividad urgente ni programada en todas las categorías
Desaparecen las coordinaciones de enfermería y sin enfermera escolar
Además, no se crean nuevos espacios sanitarios donde se garanticen la seguridad e higiene, ni se crean adjuntías de A2. En cambio, en este borrador desaparecen las coordinaciones de enfermería, que son sustituidas por responsables de enfermería y no aparece recogida la figura de la enfermera escolar que, según anunció la Conselleria conllevaba una partida presupuestaria de 300 millones.
Por último, UGT reitera su preocupación por la forma en que la Conselleria de Sanidad pretende introducir la inteligencia artificial porque podría sustituir al factor humano y no se crean comisiones de calidad y de viabilidad de pruebas realizadas ni para medir el impacto en las condiciones laborales.