La falta de un segundo técnico de Emergencias Sanitarias (TES) para la movilización de las incubadoras de transporte neonatal en la Comunitat Valenciana supone un riesgo para la integridad física del recién nacido, así como para la seguridad y salud en el trabajo del personal encargado de los traslados. UGT Serveis Públics del País Valencià lleva denunciado esta situación ante la Dirección del Servicio de Emergencias Sanitarias de la Comunitat Valenciana (SESCV) desde 2021 sin que hasta ahora se haya dado una solución. Es más, el asunto ha vuelto a quedar pendiente en la última reunión del Comité de Seguridad y Salud, lo que para UGT Serveis Públics supone una grave irresponsabilidad ya que la Conselleria de Sanidad está incumpliendo los requerimientos de la Inspección General de Trabajo y de su propio servicio de Prevención.
El riesgo durante la movilización del transporte neonatal es consecuencia del elevado volumen y peso de la incubadora (unos 160 kilogramos aproximadamente). De hecho, el fabricante de la camilla que soporta esta incubadora (modelo Kartsana) especifica que debe de ser manejada por dos operadores formados en el manejo del aparato y no uno, como ocurre en muchas ocasiones, según consta en la documentación. En la provincia de Valencia estos traslados los realiza la unidad Soporte Vital Avanzado (SVA), con una dotación de dos técnicos de emergencias, un enfermero o enfermera del SAMU acompañados de un neonatólogo,pero cuando esta unidad está averiada o cuando no se requiere especialista de neonatólogía, los traslados corren a cargo de una unidad SAMU de Valencia, integrada por personal de enfermería y médico del SAMU, pero con un sólo técnico de emergencias.
Como consecuencia de un informe emitido en 2021 por la Inspección de Trabajo, el Servicio de Prevención del SESCV emitió un documento técnico de trabajo seguro con las camillas e incubadoras utilizadas por el Servicio de Emergencias Sanitarias en el que establece a nivel general las indicaciones y recomendaciones para operadores de camillas (TES). Textualmente especifica lo siguiente: “Para la carga y descarga de una camilla ocupada siempre serán necesarios dos operadores o ayudantes.” Además, de manera específica para el transporte neonatal establece “dos operarios (debido al volumen y peso de la incubadora a trasladar)”.
Pese a los reiterados escritos dirigidos por UGT, la Conselleria de Sanitat sigue desoyendo las advertencias, así como a su propio Servicio de Prevención (el documento fue emitido en julio de 2022), por lo que está poniendo en riesgo a las criaturas, si se produce una caída de la incubadora.
Además, el sindicato tiene constancia de que la Dirección del SESCV, con el visto bueno de la Conselleria de Sanidad, ha emitido un procedimiento de trabajo en la Central Información y Coordinación de Urgencias de la Comunidad Valenciana (CICUCV) en las que no estable la movilización de un segundo técnico para la movilización de la incubadora por un SAMU. Cabe apuntar que, además, del riesgo para el recién nacido, el personal técnico que ha de trasladar en solitario la incubadora, está sometido a situación de gran vulnerabilidad y estrés. La semana pasada, UGT volvió a plantear este grave problema en el Comité de Seguridad y Salud del departamento del Hospital General de València, en el cual esta asignado el SESCV, y una vez más no hubo respuesta por parte de la Dirección Económica del SESCV. El asunto ha vuelto a dejarse pendiente de tratamiento para el siguiente comité previsto para dentro dentro de tres meses. Una dejadez, que para el sector de Sanidad de UGT Serveis Públicos resulta inadmisible